Hola, soy Mamen

Si quieres ver quién te va a ayudar en tu objetivo, esta de la izquierda soy yo.

En la foto salgo mirando al infinito, o a una ardilla, un trozo de musgo, o vete a saber. Lo mío es salir al campo y disfrutar de la naturaleza. Y cuando estoy trabajando, solo se me ve media cara porque la otra media está tapada por la cámara.

Pero se me oye, sobre todo reírme, porque me lo paso en grande con los pequeños. Se me dan bien, lo dice todo el mundo. No tengo hijos, pero no he dejado de ser niña, así que nos entendemos.

Si valoras la creatividad y buscas algo con personalidad, elige trabajar con alguien que entienda y celebre tu singularidad. Elige no solo una fotógrafa, sino una cómplice en la creación de tus recuerdos más queridos. ¿Listos para algo diferente? 

Así es trabajar conmigo

Cero postureo, mucha espontaneidad

Aquí no se viene a posar, sino a vivir el momento. Busco lo auténtico: gestos, juegos, miradas… Eso que pasa entre foto y foto y nadie más ve.

Peques, familias, mascotas… ¡Todos caben!

Me entienden bien los niños porque yo sigo jugando como ellos. Y si hay animales de por medio, ¡todavía mejor! Aquí no sobra nadie (ni nada de lo que os hace únicos).

Cada recuerdo, a tu propio ritmo

No sigo un guion cerrado ni repito las mismas fotos de siempre. Escucho lo que te hace especial y adapto la sesión a ti, a tu familia y a lo que surja ese día. Si sale algo inesperado, mejor: así los recuerdos serán solo vuestros.

Opiniones reales de familias reales

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